Doblar la rana saltarina

¿Alguna vez has escuchado hablar de la técnica del «doblar la rana saltarina»? Si eres un entusiasta del origami, seguramente esta expresión te resultará familiar. Pero, ¿qué es exactamente y por qué ha capturado la atención de tantos amantes de esta milenaria arte del papel? En este artículo te desvelaremos todos los secretos y técnicas para dominar esta fascinante habilidad. ¡Prepárate para sumergirte en el mundo del origami y aprender a doblar la rana saltarina como todo un experto!

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Así es como doblar una rana saltarina. Paso a paso no es nada difícil.
Incluso hace volteretas. Puedes verlo en el vídeo a continuación. Y a continuación te espera una historia de ranas. ¡Diviértete con la rana!

Tutorial de artesanía de rana

• Coloca el papel frente a ti.

• Primero, dobla las dos diagonales. Tire firmemente de los bordes doblados.

• Luego voltea el papel (muy importante) y dobla el borde superior hacia abajo.

• Luego desdobla la hoja nuevamente.
• Ahora dobla el papel como se muestra. Las líneas de curvatura determinan la forma.

• Esto es lo que parece.

• Ahora suaviza el triángulo.

• Gira el triángulo 90 grados en el sentido de las agujas del reloj.
• Dobla los bordes superiores derechos hacia la línea central.

• Dóblalo por la mitad.

• Esto es lo que parece.

• Dale la vuelta al papel y dobla la esquina inferior izquierda del triángulo hacia arriba.

• Repita en el otro lado.
• Luego dobla la esquina superior izquierda hacia la esquina exterior izquierda.

• Doble la punta hacia afuera.
• Haz lo mismo en el otro lado.

• Esto es lo que parece.

• Ahora dobla la parte inferior del cuerpo aproximadamente en el mismo punto que en la imagen.

• Dóblalo hacia el borde estrecho. (Puede ser un poco más ancho que en la imagen. Los saltos mortales funcionarán mejor).

• Así se ve una rana desde abajo…

• … y así sucesivamente desde arriba.

• Por último, pega los ojos y pinta las pupilas.

• Ahora, si tocas brevemente el trasero de la rana, esta saltará hacia adelante o dará una voltereta (como puedes ver en el siguiente vídeo).

¡Excelentes consejos y trucos de elaboración!

Puedes trazar todos los bordes doblados con una regla en lugar de con el dedo. Esto hace que los bordes doblados sean agradables, suaves y limpios.
Cuando doblas el cuerpo de la rana hacia atrás después del primer borde doblado, puedes dejar un espacio de 1 a 1,5 cm (para un cuadrado inicial de 15 x 15 cm). Entonces la rana salta mejor o incluso da volteretas.
Lo mejor es apilar varias ranas de diferentes tamaños a la vez, porque cada rana muestra su propio salto 😉

Concierto de ranas

Hoy, como cada almuerzo, el pato hace su ronda diaria. Al otro lado del arroyo hasta el lago. Esta mañana escucha sonidos que no había escuchado en todo el año. Parece que ella es muy famosa. «Ah», dice alegremente el pato, «por fin ha llegado el momento otra vez».

Según los sonidos, cruza el lago y llega a la orilla, donde ya han llegado otros animales: un cisne, dos ardillas y una familia de ratones. Todos escuchan los sonidos con asombro. El pato se une a ellos y ahora ven gente haciendo sonidos maravillosos. Varias ranas se han reunido en una roca que sobresale del agua muy cerca de la orilla y están dando un concierto de ranas. Es sorprendente cómo estas pequeñas criaturas pueden producir sonidos tan impresionantes y variados. Al público le encantan estos conciertos, que tienen lugar en este lugar durante todo el mes de mayo, principalmente al mediodía y luego por la noche. Llegan más oyentes: el perro sigue a más cisnes y finalmente al oso. Todos se han acomodado en el prado y escuchan atentamente el canto de las ranas.

Demasiado tarde, los involucrados notan una sombra amenazadora que cae sobre la piedra de la rana. En ese mismo momento se acerca una cigüeña. Las ranas saltan presas del pánico, pero una reacciona demasiado lenta. Una cigüeña agarra con su pico una rana. Feliz con su presa, quiere volver a despegar. No contaba con los defensores de las ranas: casi al mismo tiempo, el perro y el oso saltan hacia él con un oscuro gruñido, mientras un cisne corre hacia él con alas amenazadoras. La cigüeña se asusta tanto que la rana se cae del pico. Ahora es el momento de doblar la esquina lo más rápido posible. La cigüeña pasa junto al perro y se eleva con gracia en el aire. «No volverá», gruñe alegremente el oso.

La rana, que escapó por poco de la cigüeña, poco a poco se va calmando. Las otras ranas regresan gradualmente del agua. Poco después inician de nuevo el concierto.
Los oyentes quedan rápidamente cautivados por los encantadores sonidos y escuchan con gran atención a la orquesta.

«Pero, ¿qué es?», se pregunta el pato, y los demás oyentes también miran confusos el camino que conduce desde el bosque directamente al lago. Un coche con remolque sale del bosque. Un sonido maravilloso proviene de las ventanas. El concierto de ranas termina abruptamente, las ranas saltan rápidamente al agua y al principio se sumergen.

El coche se detiene con un chirrido justo antes del lago. Dos hombres bajan e inmediatamente empiezan a trabajar en el remolque. La pequeña y elegante lancha a motor se descubre y se transporta al agua sobre el tren de aterrizaje. Los hombres metieron el bote en el lago y subieron. El motor ruge y el barco se aleja.

«Es escandaloso cómo pueden hacer semejante ruido», grazna el pato. Pero su charla se pierde en el ruido. «Venid con nosotros al bosque», ladra el perro, «haremos un plan para deshacernos de los alborotadores».
Los animales desaparecen en el bosque, donde traman un plan sin ser molestados.
«Entonces todo el mundo sabrá qué hacer», pregunta finalmente el perro. «Sí», respondieron todos los animales al unísono.

Mientras tanto, la lancha navega constantemente de un lado a otro por el lago a un ritmo vertiginoso. Ahí es donde entran en juego los cisnes. Vuela amenazadoramente hacia el barco. Poco antes del impacto, se mueven hacia arriba con tanta violencia que los cisnes rozan con sus alas las cabezas de los hombres. «Oye», se queja uno de los hombres, «¿cuál es el punto?» Les importan los cisnes voladores. Después de unos cincuenta metros dan una vuelta y se preparan para otro ataque. «Eso es imposible. ‘Rápido, de vuelta a la orilla’, grita el otro hombre. Llegan a la orilla. Nunca antes los hombres cargaron un barco en un remolque tan rápido. Mientras tanto, vigilan a los cisnes. Ellos están nadando. ahora tranquilamente en el agua. Ambos hombres dan un suspiro de alivio. Solo entonces se dan cuenta de que un pato sentado en su parabrisas hace felizmente lo suyo. «Baja ahí, o hoy será un pato asado», uno de los hombres. Intenta asustar al pato con otra palmada. El pato rueda lentamente sobre el capó y salta por delante. En ese momento, un perro y un oso corren hacia los hombres, gruñendo y gruñendo fuertemente. «Sube al coche, Rápido», se susurran entre sí. Abren la puerta. Un puñado de ratones y ardillas saltan del coche para recibirlos. «Uf, este lugar debe estar encantado». Salgamos de aquí lo más rápido posible». Los hombres se suben a los asientos y cierran la puerta antes de que el oso y el perro lleguen al coche. El hombre al volante arranca el coche y arranca a gran velocidad. «No los volveremos a ver aquí», se queja alegremente el oso.

Entonces el conjunto se reencuentra en la sala del concierto. Hay mucho silencio allí. «¿Adónde fueron las ranas?» pregunta el pato. Se adentra en el lago. «Queridas ranas, podéis volver a salir, los alborotadores se han ido», intenta atraer a las ranas.
«Qué extraño», huele el perro alrededor de la roca, «alguien estuvo aquí». Toma un camino que conduce al bosque. Aquí encontrarás pistas claras. «Aquí había un hombre que probablemente secuestró nuestras ranas», especula el perro. «Pero los humanos no pueden hacer eso, nos roban las ranas», se ríe emocionado el pato, «¿Qué debemos hacer? “Ahora necesitamos buenos cazadores”, responde el perro: “El oso y yo los perseguiremos. Será mejor que el resto de ustedes esperen aquí”.

Y entonces el perro y el oso partieron. Después de un rato vieron una figura detrás de ellos. Los dos se acercan sigilosamente a ella. Ella es una mujer. Lleva una olla grande en sus manos, ambos pueden verla ahora. «De alguna manera tenemos que asustar a la mujer para que deje caer la olla», le susurra el perro al oso. “Está bien, la mejor manera de hacer esto es acercarte lo más posible. Luego los asustamos tarareando o gruñendo. Si todavía sostiene la olla, le agarramos las manos. Eso debería funcionar.»

Nuestros dos cazadores hacen lo mismo. Sin ser notados, se acercan mucho a la hembra y luego emiten un gruñido o zumbido aterrador. La mujer se asusta, se da vuelta, deja caer la olla y sale corriendo gritando. La olla cae al suelo, se quita la tapa y seis ranas saltan de la olla. «Gracias», dice la rana mientras recupera el rumbo. “Realmente no quería terminar en el bote.
«El lago está a unos cientos de metros, ¿puedes llegar?» pregunta el perro. “Sí, por supuesto que las ranas somos bastante buenas haciendo caminatas.

Los ocho compañeros avanzan lentamente pero finalmente llegan al lago y son recibidos felizmente por los demás. “Es bueno tenerte de regreso. «¿Cuándo es tu concierto?» preguntan las ranas. “Creo que todos podemos relajarnos, ha sido un día agotador: primero una cigüeña, luego una lancha rápida, una red de pesca, una olla y finalmente una larga caminata. Pero todos sobrevivimos y eso es lo que cuenta. Sólo estoy un poco cansado. Estáis todos cordialmente invitados a nuestro concierto nocturno esta noche al anochecer”.

Entonces los cantantes y el público se despiden y cada uno sigue su camino… hasta que oscurece. Durante este tiempo, los animales se encuentran con otros animales, que a su vez se encuentran con otros animales. Y se cuentan historias que se vuelven a contar.
Las ranas comienzan puntualmente su concierto en el escenario rocoso. El seguimiento ha aumentado considerablemente: contamos cinco patos, dos perros, seis cisnes, quince ratones, ocho ardillas, dos conejos y dos osos. Todos escuchan atentamente la orquesta y esperan poder disfrutar del concierto de ranas muchos días más.

Aquí puedes ver lo bien que salta la rana:

hacer una rana saltadora

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kannst du einen hüpfenden Frosch falten. Schritt für Schritt ist es gar nicht schwer. Der macht sogar Saltos. In dem Video ganz unten kannst du es sehen. Und weiter unten wartet eine Froschgeschichte auf dich. Viel Freude mit dem Frosch! LnRiLXlvdXR1YmV7bWluLXdpZHRoOjEwMHB4fS50Yi15b3V0dWJlPmRpdnt3aWR0aDoxMDAlO3Bvc2l0aW9uOnJlbGF0aXZlfS50Yi15b3V0dWJlPmRpdj5pZnJhbWV7Ym94LXNpemluZzpib3JkZXItYm94O3dpZHRoOjEwMCU7aGVpZ2h0OjEwMCU7cG9zaXRpb246YWJzb2x1dGU7dG9wOjA7bGVmdDowfSAudGIteW91dHViZVtkYXRhLXRvb2xzZXQtYmxvY2tzLXlvdXR1YmU9IjZjNTc0ZDU0ZmE2OTE5YjZjZjE0MjYzYTYxOTNhMDg2Il0geyB3aWR0aDogMTAwJTsgfSAudGIteW91dHViZVtkYXRhLXRvb2xzZXQtYmxvY2tzLXlvdXR1YmU9IjZjNTc0ZDU0ZmE2OTE5YjZjZjE0MjYzYTYxOTNhMDg2Il0gPiBkaXYgeyBwYWRkaW5nLXRvcDogY2FsYygxMDAlLzE2KjkpOyB9ICAgLnRiLWZpZWxkW2RhdGEtdG9vbHNldC1ibG9ja3MtZmllbGQ9IjI5NDllZTljODcxODljMzQ1ODdiMjFhZGQzMWIxZTEyIl0gYSB7IHRleHQtZGVjb3JhdGlvbjogbm9uZTsgfSAgLnRiLWZpZWxkW2RhdGEtdG9vbHNldC1ibG9ja3MtZmllbGQ9ImNmYWJkNGI4Mzg0YjlmZmU5NDAwMGI4ZDlkOGZiZGY0Il0gYSB7IHRleHQtZGVjb3JhdGlvbjogbm9uZTsgfSAudGItZ3JpZCwudGItZ3JpZD4uYmxvY2stZWRpdG9yLWlubmVyLWJsb2Nrcz4uYmxvY2stZWRpdG9yLWJsb2NrLWxpc3RfX2xheW91dHtkaXNwbGF5OmdyaWQ7Z3JpZC1yb3ctZ2FwOjI1cHg7Z3JpZC1jb2x1bW4tZ2FwOjI1cHh9LnRiLWdyaWQtaXRlbXtiYWNrZ3JvdW5kOiNkMzhhMDM7cGFkZGluZzozMHB4fS50Yi1ncmlkLWNvbHVtbntmbGV4LXdyYXA6d3JhcH0udGItZ3JpZC1jb2x1bW4+Knt3aWR0aDoxMDAlfS50Yi1ncmlkLWNvbHVtbi50Yi1ncmlkLWFsaWduLXRvcHt3aWR0aDoxMDAlO2Rpc3BsYXk6ZmxleDthbGlnbi1jb250ZW50OmZsZXgtc3RhcnR9LnRiLWdyaWQtY29sdW1uLnRiLWdyaWQtYWxpZ24tY2VudGVye3dpZHRoOjEwMCU7ZGlzcGxheTpmbGV4O2FsaWduLWNvbnRlbnQ6Y2VudGVyfS50Yi1ncmlkLWNvbHVtbi50Yi1ncmlkLWFsaWduLWJvdHRvbXt3aWR0aDoxMDAlO2Rpc3BsYXk6ZmxleDthbGlnbi1jb250ZW50OmZsZXgtZW5kfSAud3AtYmxvY2stdG9vbHNldC1ibG9ja3MtZ3JpZC50Yi1ncmlkW2RhdGEtdG9vbHNldC1ibG9ja3MtZ3JpZD0iM2Q5YzM5OWZlNjI1ZTFiOTcyZjgxN2EwNjgwMjI5ZjYiXSB7IGdyaWQtdGVtcGxhdGUtY29sdW1uczogbWlubWF4KDAsIDAuNWZyKSBtaW5tYXgoMCwgMC41ZnIpO2dyaWQtYXV0by1mbG93OiByb3cgfSAud3AtYmxvY2stdG9vbHNldC1ibG9ja3MtZ3JpZC50Yi1ncmlkW2RhdGEtdG9vbHNldC1ibG9ja3MtZ3JpZD0iM2Q5YzM5OWZlNjI1ZTFiOTcyZjgxN2EwNjgwMjI5ZjYiXSA+IC50Yi1ncmlkLWNvbHVtbjpudGgtb2YtdHlwZSgybiArIDEpIHsgZ3JpZC1jb2x1bW46IDEgfSAud3AtYmxvY2stdG9vbHNldC1ibG9ja3MtZ3JpZC50Yi1ncmlkW2RhdGEtdG9vbHNldC1ibG9ja3MtZ3JpZD0iM2Q5YzM5OWZlNjI1ZTFiOTcyZjgxN2EwNjgwMjI5ZjYiXSA+IC50Yi1ncmlkLWNvbHVtbjpudGgtb2YtdHlwZSgybiArIDIpIHsgZ3JpZC1jb2x1bW46IDIgfSAgLnRiLWZpZWxkW2RhdGEtdG9vbHNldC1ibG9ja3MtZmllbGQ9ImEwNDYxMTVkYjQ3MzU4ZDQ2YTI2ZTU0NzkwMTZlYmQ1Il0gYSB7IHRleHQtZGVjb3JhdGlvbjogbm9uZTsgfSAud3AtYmxvY2stdG9vbHNldC1ibG9ja3MtZ3JpZC1jb2x1bW4udGItZ3JpZC1jb2x1bW5bZGF0YS10b29sc2V0LWJsb2Nrcy1ncmlkLWNvbHVtbj0iMzAzNGZiZTg4NmMxMTA1NGU5NWI0NmIwOWQzZTQxMTIiXSB7IGRpc3BsYXk6IGZsZXg7IH0gIC50Yi1maWVsZFtkYXRhLXRvb2xzZXQtYmxvY2tzLWZpZWxkPSI1OTRhNmYyOGRjZDI4YWMwMzMyNDIyYTRkNGNhMTMzNiJdIGEgeyB0ZXh0LWRlY29yYXRpb246IG5vbmU7IH0gQG1lZGlhIG9ubHkgc2NyZWVuIGFuZCAobWF4LXdpZHRoOiA3ODFweCkgeyAudGIteW91dHViZXttaW4td2lkdGg6MTAwcHh9LnRiLXlvdXR1YmU+ZGl2e3dpZHRoOjEwMCU7cG9zaXRpb246cmVsYXRpdmV9LnRiLXlvdXR1YmU+ZGl2PmlmcmFtZXtib3gtc2l6aW5nOmJvcmRlci1ib3g7d2lkdGg6MTAwJTtoZWlnaHQ6MTAwJTtwb3NpdGlvbjphYnNvbHV0ZTt0b3A6MDtsZWZ0OjB9ICAgLnRiLWdyaWQsLnRiLWdyaWQ+LmJsb2NrLWVkaXRvci1pbm5lci1ibG9ja3M+LmJsb2NrLWVkaXRvci1ibG9jay1saXN0X19sYXlvdXR7ZGlzcGxheTpncmlkO2dyaWQtcm93LWdhcDoyNXB4O2dyaWQtY29sdW1uLWdhcDoyNXB4fS50Yi1ncmlkLWl0ZW17YmFja2dyb3VuZDojZDM4YTAzO3BhZGRpbmc6MzBweH0udGItZ3JpZC1jb2x1bW57ZmxleC13cmFwOndyYXB9LnRiLWdyaWQtY29sdW1uPip7d2lkdGg6MTAwJX0udGItZ3JpZC1jb2x1bW4udGItZ3JpZC1hbGlnbi10b3B7d2lkdGg6MTAwJTtkaXNwbGF5OmZsZXg7YWxpZ24tY29udGVudDpmbGV4LXN0YXJ0fS50Yi1ncmlkLWNvbHVtbi50Yi1ncmlkLWFsaWduLWNlbnRlcnt3aWR0aDoxMDAlO2Rpc3BsYXk6ZmxleDthbGlnbi1jb250ZW50OmNlbnRlcn0udGItZ3JpZC1jb2x1bW4udGItZ3JpZC1hbGlnbi1ib3R0b217d2lkdGg6MTAwJTtkaXNwbGF5OmZsZXg7YWxpZ24tY29udGVudDpmbGV4LWVuZH0gLndwLWJsb2NrLXRvb2xzZXQtYmxvY2tzLWdyaWQudGItZ3JpZFtkYXRhLXRvb2xzZXQtYmxvY2tzLWdyaWQ9IjNkOWMzOTlmZTYyNWUxYjk3MmY4MTdhMDY4MDIyOWY2Il0geyBncmlkLXRlbXBsYXRlLWNvbHVtbnM6IG1pbm1heCgwLCAwLjVmcikgbWlubWF4KDAsIDAuNWZyKTtncmlkLWF1dG8tZmxvdzogcm93IH0gLndwLWJsb2NrLXRvb2xzZXQtYmxvY2tzLWdyaWQudGItZ3JpZFtkYXRhLXRvb2xzZXQtYmxvY2tzLWdyaWQ9IjNkOWMzOTlmZTYyNWUxYjk3MmY4MTdhMDY4MDIyOWY2Il0gPiAudGItZ3JpZC1jb2x1bW46bnRoLW9mLXR5cGUoMm4gKyAxKSB7IGdyaWQtY29sdW1uOiAxIH0gLndwLWJsb2NrLXRvb2xzZXQtYmxvY2tzLWdyaWQudGItZ3JpZFtkYXRhLXRvb2xzZXQtYmxvY2tzLWdyaWQ9IjNkOWMzOTlmZTYyNWUxYjk3MmY4MTdhMDY4MDIyOWY2Il0gPiAudGItZ3JpZC1jb2x1bW46bnRoLW9mLXR5cGUoMm4gKyAyKSB7IGdyaWQtY29sdW1uOiAyIH0gIC53cC1ibG9jay10b29sc2V0LWJsb2Nrcy1ncmlkLWNvbHVtbi50Yi1ncmlkLWNvbHVtbltkYXRhLXRvb2xzZXQtYmxvY2tzLWdyaWQtY29sdW1uPSIzMDM0ZmJlODg2YzExMDU0ZTk1YjQ2YjA5ZDNlNDExMiJdIHsgZGlzcGxheTogZmxleDsgfSAgIH0gQG1lZGlhIG9ubHkgc2NyZWVuIGFuZCAobWF4LXdpZHRoOiA1OTlweCkgeyAudGIteW91dHViZXttaW4td2lkdGg6MTAwcHh9LnRiLXlvdXR1YmU+ZGl2e3dpZHRoOjEwMCU7cG9zaXRpb246cmVsYXRpdmV9LnRiLXlvdXR1YmU+ZGl2PmlmcmFtZXtib3gtc2l6aW5nOmJvcmRlci1ib3g7d2lkdGg6MTAwJTtoZWlnaHQ6MTAwJTtwb3NpdGlvbjphYnNvbHV0ZTt0b3A6MDtsZWZ0OjB9ICAgLnRiLWdyaWQsLnRiLWdyaWQ+LmJsb2NrLWVkaXRvci1pbm5lci1ibG9ja3M+LmJsb2NrLWVkaXRvci1ibG9jay1saXN0X19sYXlvdXR7ZGlzcGxheTpncmlkO2dyaWQtcm93LWdhcDoyNXB4O2dyaWQtY29sdW1uLWdhcDoyNXB4fS50Yi1ncmlkLWl0ZW17YmFja2dyb3VuZDojZDM4YTAzO3BhZGRpbmc6MzBweH0udGItZ3JpZC1jb2x1bW57ZmxleC13cmFwOndyYXB9LnRiLWdyaWQtY29sdW1uPip7d2lkdGg6MTAwJX0udGItZ3JpZC1jb2x1bW4udGItZ3JpZC1hbGlnbi10b3B7d2lkdGg6MTAwJTtk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benötigst dafür: 1 Quadrat aus grünem Papier (der kleine Frosch ist aus einem 7,5 x 7,5 cm Quadrat, der große aus einem 15 x 15 cm großen) 2 kleine weiße Kreise für die Augen (am besten aus einem Papierlocher) 1 schwarzen Stift .kt-svg-icons_f77fa9-90 .kt-svg-item-0 .kb-svg-icon-wrap{color:#289f73;font-size:40px;}.kt-svg-icons_f77fa9-90 .kt-svg-item-1 .kb-svg-icon-wrap{color:#289f73;font-size:50px;}.kt-svg-icons_f77fa9-90 .kt-svg-item-2 .kb-svg-icon-wrap{color:#289f73;font-size:40px;}.wp-block-kadence-icon.kt-svg-icons_f77fa9-90{justify-content:center;} Bastelanleitung für einen Frosch Lege das Papier vor dich.   Falte zuerst die beiden Diagonalen. Ziehe die Faltkanten kräftig nach.   Drehe das Papier dann um (ganz wichtig) und falte den oberen Rand zum unteren.   Falte das Blatt dann wieder auseinander. Jetzt falte das Papier wie auf dem Bild zusammen. Die Faltlinien geben die Form vor.   So sieht es dann aus.   Streiche nun das Dreieck glatt.   Drehe das Dreieck um 90 Grad im Uhrzeigersinn. Falte die rechten oberen Ränder zur Mittellinie.   Falte sie zur Hälfte wieder zurück.   So sieht es dann aus.   Drehe das Papier um und falte die linke untere Spitze des Dreiecks zur oberen.   Wiederhole es auf der anderen Seite. Falte dann die linke obere Ecke zur linken äußeren.   Knicke die Spitze nach außen. Mache das Gleiche auf der anderen Seite.   So sieht es dann aus.   Jetzt falte den Unterkörper etwa an der Stelle wie auf dem Bild um.   Falte ihn bis auf einen schmalen Rand wieder zurück. (Es kann ruhig etwas breiter sein, als auf dem Bild gezeigt wird. Saltos gelingen dann besser.)   So sieht der Frosch dann von unten aus…   … und so von oben.   Klebe zum Schluss noch die Augen auf und male die Pupillen.   Wenn du den Frosch jetzt kurz am Hinterteil antippst, springt er nach vorn oder macht einen Salto (wie im anschließendem Video zu sehen).   Tolle Tipps und Tricks zum Basteln! Du kannst alle Faltkanten mithilfe eines Lineals nachstreichen anstatt mit dem Finger. So werden die Faltkanten schön glatt und sauber.Wenn du den Körper des Froschs nach der ersten Faltkante wieder zurück faltest, kannst du ruhig 1 bis 1,5 cm Abstand lassen (bei einem Ausgangsquadrat von 15 x 15 cm). Dann springt der Frosch besser, bzw. macht sogar Saltos.Am besten ist es, gleich mehrere Frösche in unterschiedlichen Größen zu falten, da jeder Frosch sein eigenes Sprungverhalten zeigt 😉 Das Froschkonzert Wie jeden Mittag so auch heute schwimmt die Ente ihre tägliche Runde. Durch den Bach in den See hinein. Diesen Morgen hört sie Laute, die sie das ganze Jahr über noch nicht vernommen hat. Laute, die ihr aber durchaus gut vertraut sind. „Hach“, freut sich die Ente, „ist es endlich wieder so weit“. Den Lauten folgend durchquert sie den See, gelangt ans Ufer, wo sich bereits andere Tiere eingefunden haben: ein Schwan, zwei Eichhörnchen und eine Mäusefamilie. Alle lauschen gebannt den Klängen. Die Ente gesellt sich zu ihnen und erblickt jetzt auch die Verursacher der wundervollen Klänge. Auf einem Felsen, der ganz nah am Ufer aus dem Wasser ragt, haben sich mehrere Frösche versammelt und geben ein Froschkonzert zum besten. Erstaunlich, wie diese kleinen Wesen so eindrucksvolle und vielfältige Töne erzeugen können. Die Zuhörer lieben diese Konzerte, die den ganzen Mai über meist zur Mittagszeit, dann wieder in den Abendstunden an diesem Ort stattfinden. Noch mehr Zuhörer treffen ein: Ein Hund gefolgt von weiteren Schwänen und zu guter Letzt sogar ein Bär. Alle haben es sich auf der Wiese gemütlich gemacht und lauschen andächtig den Froschgesängen. Zu spät bemerken die Beteiligten den drohenden Schatten, der sich über den Felsen der Frösche legt. Im selben Moment nähert sich auch schon ein Storch im Sturzflug. Die Frösche springen panikartig auseinander, doch einer reagiert zu langsam. Der Storch bekommt den Frosch mit seinem Schnabel zu fassen. Glücklich über seine Beute will er wieder abheben. Dabei hat er nicht mit den Verteidigern der Frösche gerechnet: Nahezu zeitgleich springen der Hund und der Bär mit einem finsteren Knurren auf ihn zu, während ein Schwan mit drohenden Flügeln auf ihn zuläuft. Der Storch ist so erschrocken, dass ihm der Frosch aus dem Schnabel fällt. Jetzt heißt es, schnellstmöglich die Kurve zu kriegen. Der Storch schlüpft seitlich am Hund vorbei und gleitet elegant in die Luft über. „Der kommt nicht wieder“, brummt der Bär zufrieden. Der Frosch, der dem Storch um ein Haar entkommen ist, beruhigt sich langsam wieder. Die anderen Frösche kehren nach und nach aus dem Wasser zurück. Kurze Zeit später stimmen sie ihr Konzert wieder an.Die Zuhörer sind schnell wieder von den bezaubernden Klängen eingenommen und lauschen verzückt dem Orchester. „Doch was ist das“, fragt sich die Ente und auch die anderen Zuhörer blicken iriitiert zur Straße, die aus dem Wald heraus direkt an den See führt. Dort kommt ein Auto mit Anhänger aus dem Wald heraus geschossen. Ein beatiger Sound dröhnt aus den Fenstern. Das Froschkonzert endet abruppt, die Frösche springen fluchtartig ins Wasser und tauchen erstmal unter. Mit quietschenden Reifen kommt das Auto kurz vorm See zum Stehen. Zwei Männer steigen aus und machen sich sofort an dem  Anhänger zu schaffen. Ein kleines schnittiges Motorboot wird freigelegt und mithilfe eines Fahrgestells zum Wasser befördert. Die Männer setzen das Boot in den See und steigen ein. Der Motor heult auf und das Boot saust los. „Das ist eine Unverschämtheit, wie können die solch einen Lärm machen“, schnattert die Ente los. Ihr Geschnattere geht aber in dem Lärm unter. „Kommt alle mit in den Wald“, bellt der Hund, „wir schmieden einen Plan, wie wir die Störenfriede loswerden.“Die Tiere verschwinden in den Wald, wo sie ungestört einen Plan schmieden.„Dann weiß jeder, was er zu tun hat“, fragt der Hund abschließend. „Ja“, antworten alle Tiere einstimmig. Währenddessen durchquert das  Motorboot den See ununterbrochen in einem Mordstempo hin und wieder zurück. Da treten die Schwäne ins Spiel. Drohend fliegen sie frontal auf das Boot zu. Kurz vorm Zusammenstoß weichen sie nach oben aus, so haarscharf, dass die Schwäne die Köpfe der Männer noch mit ihren Flügeln streifen. „He“, beschwert sich einer der Männer, „was soll das“. Sie blicken den fliegenden Schwänen hinterher. Diese machen nach ungefähr fünzig Metern eine Kehrtwende und formieren sich zu einem weiteren Angriff. „Das gibt es doch nicht. Schnell, zurück zum Ufer“, kreischt der andere Mann. Sie erreichen das Ufer. Nie zuvor haben die Männer das Boot so schnell auf den Anhänger verfrachtet. Die ganze Zeit über behalten sie die Schwäne im Blick. Diese schwimmen jetzt ganz ruhig im Wasser. Die beiden Männer atmen auf. Da erst bemerken sie, dass eine Ente auf ihrer Windschutzscheibe sitzt und dort genüsslich ihr Geschäft verrichtet. „Wirst du wohl da runter kommen, sonst gibt es heute noch einen Entenbraten“, versucht einer der Männer die Ente mit einem zusätzlichen Händeklatschen zu verscheuchen. Die Ente watschelt bedächtig über die Motorhaube und hüpft vorn herunter. In dem Moment kommen der Hund und der Bär laut knurrend und brummend auf die Männer zugerannt. „Schnell ins Auto“, raunt der eine dem anderen zu. Sie öffnen die Türen. Aus dem  Auto springen ihnen eine Handvoll Mäuse und Eichhörnchen entgegen. „Igitt, dieser Ort muss verhext sein. Lass uns schleunigst von hier verschwinden.“ Die Männer schwingen sich auf die Sitze und können die Türen gerade noch schließen, bevor der Bär und der Hund das Auto erreichen. Der Mann am Steuer startet den Wagen und fährt in einem Affentempo davon. „Die sehen wir hier auch nicht wieder“, brummt der Bär zufrieden. So versammelt sich die Truppe wieder am Konzertort. Dort ist es ganz ruhig. „Wo sind die Frösche hin“, fragt die Ente. Sie watschelt in den See. „Liebe Frösche, ihr könnt wieder herauskommen, die Störenfriede sind weg“, versucht sie die Frösche zu locken.„Merkwürdig“, der Hund schnüffelt um den Felsen, „es ist jemand hier gewesen“. Er greift die Fährte auf, die in den Wald hinein führt. Hier finden sie deutliche Fußabdrücke. „Ein Mensch war hier und hat vermutlich unsere Frösche entführt“, mutmaßt der Hund. „Aber das kann der Mensch doch nicht bringen, uns unsere Frösche klauen“, schnattert die Ente aufgeregt: „Was sollen wir denn nur tun? „Jetzt brauchen wir gute Jäger“, antwortet der Hund: „Der Bär und ich werden die Verfolgung aufnehmen. Ihr anderen wartet besser hier.“ Und so machen sich der Hund und der…

Doblar la rana saltarina

Si estás interesado en aprender cómo doblar la rana saltarina, has llegado al lugar correcto. En este artículo, responderemos a algunas preguntas frecuentes sobre este divertido arte del origami.

¿Qué es la técnica de doblar la rana saltarina?

La técnica de doblar la rana saltarina es un tipo de origami que permite crear una figura de rana que puede saltar cuando la presionas con los dedos. Es una manualidad muy popular y divertida para hacer con papel.

¿Cuáles son los materiales necesarios?

Para doblar la rana saltarina, solo necesitarás una hoja de papel cuadrada de cualquier tamaño. Puedes usar papel de origami especializado o cualquier otro tipo de papel que tengas a mano. Asegúrate de que el papel sea lo suficientemente resistente para sostener la forma de la rana.

¿Cómo se dobla la rana saltarina?

1. Comienza con una hoja de papel cuadrada y asegúrate de que uno de los lados esté orientado hacia ti.
2. Dobla el papel por la mitad, formando un triángulo.
3. Luego, dobla nuevamente el triángulo por la mitad, esta vez en la dirección opuesta. Debe quedar un triángulo más pequeño.
4. Ahora, toma uno de los extremos del triángulo y dóblalo hacia el centro, siguiendo la línea central del papel.
5. Repite el paso anterior con el otro extremo del triángulo.
6. A continuación, gira el papel hacia el otro lado y dobla las esquinas inferiores hacia arriba para formar las patas traseras de la rana.
7. Voltea nuevamente el papel y dobla un extremo hacia abajo para crear la cabeza de la rana.
8. Finalmente, simplemente presiona ligeramente la parte posterior de la rana y ¡verás cómo salta!

¿Dónde puedo encontrar instrucciones más detalladas?

Si deseas instrucciones más detalladas o gráficos visuales para ayudarte en el proceso de doblado de la rana saltarina, te recomendamos visitar los siguientes enlaces:

Video tutorial para doblar la rana saltarina

Instrucciones paso a paso con imágenes para el doblado de la base de la rana saltarina

Esperamos que estas referencias te sean útiles y te guíen en tu aventura para aprender a doblar la rana saltarina. ¡Diviértete explorando el fascinante mundo del origami!